Yo me he dado cuenta como todos, de que un clavo parece que vaya hundiendo otro, es decir que sale un escándalo, unos acusan a otros y éstos niegan su implicación, y sin que haya verdaderas destituciones ni acabar de solucionar la cosa sale otro asunto peor, con el mismo procedimiento, de tal modo que hay una gran cantidad de gente supuestamente implicada en asuntos de lo más turbio, pero el meollo de la cuestión, lo que se dice el meollo, no se aclara en ningún caso, ya sea un culpable al que escarmentar, ya sea la devolución de todos los dineros que nos han presuntamente levantado.
La ley en nuestro país es lenta, muy lenta, tanto que por el procedimiento de la prescripción de los casos, éstos se pierden entre los legajos de los juzgados dejados de la mano de dios según hemos visto repetidamente en numerosas imágenes de televisión.
El caso es que ahora dicen que los juzgados, la policía, hacienda, la guardia civil, y hasta los detectives privados, no dan a basto, pero parece que a algunos les importa un pito, no hay más que ver la foto campeona a la mala educación, la de mister Bárcenas, claro.
Madre mía, no me extraña que hasta el Santo Padre haya ahuecado, el pobre....
Y digo yo, será porque no tiene fuerzas para perdonar tantos pecados del mundo, y sobre todo de España, donde sabemos que los más pecadores son también los más creyentes, o será porque a él también le ha caído la marimorena por aquello de decir que no hubo mula, ni buey y que los reyes magos de oriente eran en realidad de Andalucía?
Ay señor, señor, que diría el maestro Pajares!
